Las políticas de sostenibilidad de las empresas tiene que ser de toda la organización

Para un desarrollo minero con viabilidad social, se requiere: Que el Estado defina la estrategia de gestión social en el sector minero y extractivo, incluyendo la prevención y gestión de conflictos socio político; en todas las etapas de la minería. Que las empresas tengan políticas y estándares que aplique la gestión social como parte de su estrategia de negocios y que se demuestre en la realidad. Que las empresas se involucren desde momentos tempranos con su entorno social con visión de sostenibilidad y valor compartido.

 

 

Para ello, se propone lo siguiente:

  • El Estado ha venido mejorando sus capacidades para atender los asuntos de relacionamiento social en la minería; por ejemplo el Ministerio de Energía y Minas (MEM) acaba de publicar el “Kit de herramientas de relacionamiento y comunicación para una exploración responsable”, ha creado el “Centro de convergencias y buenas practicas minero–energéticas RIMAY: Con visión de la Minería al 2030”; sin embargo en la atención de conflictos sociales actúa reactivamente, sin alineamiento entre los diferentes sectores del Estado y falta de cumplimiento de compromisos asumidos.
  • Al Estado le falta completar la estrategia de gestión social y prevención de conflictos socio políticos en todas las etapas de la minería. El Estado junto con las empresas mineras debe actuar proactivamente y establecer canales de comunicación, diálogo y buen relacionamiento; para lograr la viabilidad social de los proyectos mineros y la sostenibilidad de las operaciones mineras.
  • Las empresas tienen que incorporar la gestión social, más allá de su relacionamiento comunitario, como parte de su estrategia de negocios a largo plazo, defendiendo sus valores y principios empresariales, con programas de cumplimiento ético para toda la organización y su relación con todos los grupos de interés (multiactor). No aplicar la gestión social por coerción o conveniencia, sino por convicción (como decía nuestro amigo Ricardo Morel). Las políticas de sostenibilidad de las empresas tienen que ser de toda la organización y no solo del área social o relaciones comunitarias, liderado por el nivel más alto de la empresa; es parte de todo el negocio, que al final da valor a los resultados de la empresa y a la sociedad.
  • La intervención social de las empresas debe ser desde el inicio del proyecto, inclusive antes de la exploración y los estudios técnicos; interviniendo socialmente con todos los grupos de interés, sin escatimar a nadie; construyendo confianza y buen relacionamiento, ganando su consentimiento hoy llamado licencia social a largo plazo, con visión de sostenibilidad y valor compartido.
  • Que la población sienta que la minería es un aliado para su desarrollo, sin reemplazar al Estado; desarrollar planes estratégicos de desarrollo local de manera participativa, para que sea la visión y la línea de desarrollo conjunto de la comunidad y de la empresa.
  • Actualmente el relacionamiento comunitario y la gestión social se encuentra muy influenciado por diferentes orientaciones políticas y muchas veces no tomamos en cuenta esta situación y los obviamos, dejando su actuación libremente o solo calificándolos de opositores a la minería.

Debemos romper paradigmas para también hacer relacionamiento político o hacer política, que no es hacer política partidaria o de apoyo a algún grupo político, sino se trata de hacer política, interviniendo en la clase política y los medios de comunicación; de manera directa, comunicando y participando en procesos de diálogo sincero y efectivo; que conozcan de manera directa cómo funciona la mina y cómo se previene o controla los impactos que le preocupan. Tener una comunicación más directa en todos los espacios, no solo mineros, sino de la sociedad civil, para relacionarse con todos y conozcan la minería por dentro; que no somos malos como nos pintan algunos. Finalmente, comunicar los impactos positivos de la minería por centros mineros, en los aspectos sociales, económicos; desde las comunidades del entorno, a nivel provincial, regional y nacional.

Artículo de colaboración: 

Ing. Lucio Rios Q.
Profesor de la Escuela de Ingeniería de Minas de la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI)

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